El pote de cal, un viejo rasgo de la cultura de Vietnam

La casa del profesor Ha Ton Vinh se puede considerar un museo de antigüedades. Su colección de 300 potes de cal de diversas edades evidencia no sólo su afición, sino que constituye también un tesoro valioso de la cultura de Vietnam.

Los potes de cal tienen identidades culturales e históricas especiales. Estos valores están vinculados con leyendas nacionales, y la costumbre de masticar el betel de los vietnamitas. Recuerdan a la gente las imágenes queridas de las madres y las abuelas, y las grandes ceremonias, tales como la de pedir la mano de la novia y la boda.

En las familias vietnamitas, especialmente en áreas rurales, se utiliza mucho el pote de cal en las actividades cotidianas. Cuando la cal se endurece o el pote se deteriora, el dueño lo sustituye por un nuevo. Los potes averiados son puestos bajo banianos o llevados a templos y capillas.

Para lograr su colección única de potes de cal, el profesor Ha Ton Vinh ha viajado a todos los rincones del país. En su colección hay potes antiguos con hermosos diseños decorativos, tales como nuez de areca, y flores y hojas del betel con colores vivos. Las formas de los potes varían, según la inspiración de sus fabricantes, por ejemplo, algunos parecen teteras, mientras que otros semejan floreros. Los potes se hacen de cerámica o porcelana con una capa de esmalte blanca o verde, y tienen diversos dibujos, tales como hierba, nubes o motivos aldeanos. Se adornan además con diseños delicados, tales como dragones que simbolizan abundancia, poder y buenos presagios. Las imágenes más comunes incluyen paisajes de áreas rurales, templos, pagodas, montañas y ríos, celebraciones festivas, entre otras.

Los tamaños de los potes son diversos. Por ejemplo, algunos son tan pequeños que pueden ser sostenidos en la palma de una mano, mientras que otros requieren de alguna fuerza para levantarlos. En la colección del profesor Ha Ton Vinh, hay dos piezas grandes que datan del siglo XIX con un peso “record” de más de 10 kg cada uno, y otro que es único por su forma especial. La boca de este es de 20 cm de alto, casi un palmo sobre la manija. Esto se puede explicar debido a que cada vez que se extrae cal del pote, deja en su boca alguna cantidad que llegó a solidificarse. Después de un período de tiempo, la cal acumulada adquirió la forma de una miniatura rocosa.

Ha Ton Vinh ha enviado algunas de sus antigüedades a exposiciones en Estados Unidos. Proyecta realizar una exposición en el país con el tema de La cultura antigua de Vietnam a través de los potes de cal y organizar otra muestra en el extranjero. Su colección, que lleva en sí la cultura de la familias y la comunidad vietnamita, evidencia los esfuerzos del profesor Ha Ton Vinh en la preservación de un valioso patrimonio del país.